La Anunciación del Señor
Debido a la importancia de esta hermosa fiesta de la Anunciación, les enviamos este artículo cada año. Este artículo indirectamente define y explica el por qué existe un movimiento “Pro-Vida”. Sin esta fiesta, el movimiento pro-vida sería menos comprendido y su lucha por seguir adelante, aún más ardua. Es necesario que cada año leamos sobre la importancia de este día, pues nos ayuda a entender mejor el sentido del movimiento y así, podremos propagar más fácilmente esta importancia entre otras personas. Además, nos ayuda a poner nuestra vida evangélica en la perspectiva correcta. El mayor enemigo de la concepción es la anticoncepción. El día de la Anunciación es el día más grande pare el movimiento a favor de la vida por lo que sucedió ese mismo día. Esta gran fiesta tomó su nombre de la buena nueva anunciada por el Arcángel Gabriel a la Santísima Virgen María, referente a la Encarnación del Hijo de Dios. Y en aquel momento el Hijo de Dios se encarnó y se hizo hombre en el vientre Santísimo de la Virgen María. Día grande y mil veces bendito en el que Dios se vino a vivir entre nosotros. De hecho, varios países particularmente en América Latina han escogido ese día para apropiadamente dedicarlo para el día del niño por nacer. En muchos de estos países el día es feriado. Favor de leer abajo, nuestra carta anual detallando este hermoso día de esta fiesta de la Anunciación: Extractos del texto: http://dayoftheunbornchild.com Día del Niño por Nacer Cuando conmemoramos la fiesta de la Anunciación el día 25 de marzo, celebramos la fundación del movimiento Pro-vida – lo que impulsa la Cultura de la Vida. Esta festividad originalmente se llamaba “La Concepción de nuestro Señor Jesús” o también “Festividad de la Encarnación del Señor”, es decir, el momento en que Dios se hizo hombre. Es el primer día de la vida humana de Nuestro Señor Jesucristo. Contemplando esta festividad, nosotros reconocemos los 9 meses de gestación, que van desde el 25 de marzo hasta el 25 de diciembre. Este periodo es igual al periodo de gestación de un embarazo regular. Al respecto, no podemos negar “que el momento cuando Dios se hizo hombre en el vientre de una virgen en Nazaret es el momento más reverencial de nuestra historia”. De hecho, “la festividad del 25 de marzo fue la celebración más difundida porque marcaba el inicio del año en el antiguo calendario pre-Gregoriano, pero entre los siglos XVI y XVII algunos países comenzaron a adoptar el primero de enero como el día del año nuevo”. Después de todo, el evento más importante en nuestras vidas es el momento de nuestra propia concepción porque es a través de esto que todo lo demás es posible, incluyendo nuestra salvación. “Asimismo, sino fuera por la Encarnación de Cristo en Su concepción, no hubiesen ocurrido ni la expiación en la cruz, ni la resurrección de entre los muertos”. Para entender más las implicaciones próvida de esta celebración, “la Fiesta de la Anunciación es el momento en que Cristo, el Verbo Eterno, se hace hombre por el poder del Espíritu Santo. Este fue el primer día de Su vida humana que el compartió con nosotros en la tierra. La Encarnación no fue alcanzada cuando Jesús llego a la adultez, o cuando fue revelado al mundo en su nacimiento, sino que pasó cuando El asumió nuestra carne humana en Su concepción en el vientre de la Virgen María. La Encarnación claramente no tomó lugar al momento del nacimiento del Divino Niño, sino en Su concepción”. Para poner esto en perspectiva, “fue en el momento de la Anunciación en Nazaret cuando Dios tomó la condición humana en el vientre de María…y fue en Belén que El hizo su aparición como un indefenso bebe. La primera Navidad en Belén no fue el inicio de Cristo el Verbo Eterno cuya divinidad no tuvo inicio y cuya vida humana comenzó nueve meses antes en Nazaret. La razón por la cual la Navidad es tan importante es porque fue un nuevo comienzo para nosotros – el día que la Encarnación fue revelado al mundo, es decir, la primera vez que pudimos ver a Jesús cara a cara”. Afortunadamente, la Festividad de la Anunciación o la Concepción de Cristo es cada vez más reconocida como el “Día del Niño por Nacer” por muchas naciones Latinoamérica para recordarnos de la vida en el vientre antes de nacer. El Salvador fue el primer país que declaró la observancia del día en 1993. El "Día del Derecho de Nacer" fue proclamado por la Asamblea Legislativa gracias a los esfuerzos de los grupos pro-vida, especialmente la “Fundación Sí a la Vida” en El Salvador. En la actualidad la Argentina, Chile, Guatemala, Costa Rica, Nicaragua, la República Dominicana, Perú y el Paraguay también observan este día. Pero no será hasta que el gobierno de los Estados Unidos reconozca este día como tal, que la Cultura de la Vida estará en desventaja en este país. Hispanics of Texas for Life / Hispanos de Texas por la Vida Raul Melchor
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En la called San Jacinto
El pasado sábado 18 de marzo, mientras rezábamos frente al centro de abortos de la calle San Jacinto, platicamos con una joven quien tenía cita para abortar a su bebé. La joven parecía aliviada al hablar con nosotros. Momentos más tarde comenzó a llorar. Nuestra hermana pro-vida, Christine, madre de 8, envió a la joven a un centro de ayuda a la mujer embarazada donde le ofrecieron verdadera ayuda para garantizar que tendría un embarazo sano y un alumbramiento feliz. Unos días antes, frente al mismo centro de abortos, Christine conoció a otra mamá embarazada y la llevó al mismo centro de ayuda. Legislación Pro-Vida Oremos para que esos cambios al Affordable Care Act (ACA) propuestos por el Presidente Trump en lo que se refiere al respeto por la vida, pronto se lleven a cabo para que todos aquellos de nosotros los que estamos inscritos bajo el ACA así como los contribuyentes, no apoyemos indirectamente al aborto a través del sistema público de cuidado a la salud. Esto es aparte del retiro de apoyo financiero de Planned Parenthood. Todo los sábados Les invitamos a acompañarnos a rezar el rosario todo los sábados, desde las 8:15 hasta las 10:15 de la mañana, frente al centro de abortos que se encuentra en el 4820 de la calle San Jacinto, bajo la enorme imagen de Nuestra Señora de Guadalupe Venga, solo, acompañado por su familia u otros. Rezamos mientras las madres embarazadas entran para abortar a su bebé. Hispanos de Texas por la Vida. El sábado del, 11 de febrero, presenciamos que otra ambulancia llegaba a recoger a una madre en el centro de abortos ubicado en el 4820 de la calle San Jacinto, aquí en Houston. No sabemos si la madre murió durante un aborto Los estacionamientos estaban completamente llenos, como de costumbre. Mientras rezábamos, el equipo de paramédicos trabajaba apresuradamente para llevarse a la paciente. Los empleado del centro de abortos hacían todo lo que podían para cubrir y ocultar el cuerpo de la paciente, de nosotros y del público, para evitar que los medios reportaran el hecho; una madre embarazada más seriamente herida, quizá de muerte, debido a un aborto fallido. Cuando una madre con hijos muere durante un aborto, deja tras de sí huérfanos.
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