El jueves pasado, mientras estábamos frente al centro de abortos en la calle San Jacinto, se unieron al grupo alrededor de 15 mujeres adolescentes, católicas devotas bajo la guía de adultos consagrados de la Orden de Regnum Christi. Su alegría en el Señor era evidente cuando oraban y trataban de hablar con las madres embarazadas que entraban en el edificio. Su entusiasmo por la vida capturó la atención de muchas personas que entraban al edificio, así como a empleados del mismo. Fue una bendición que este grupo hablara inglés, mientras que otros eran bilingües asegurando de esta manera que no hubiera barreras por el idioma al tratar de comunicarse con las madres. Estas chicas vinieron de ciudades lejanas y algunas de México. Mientras oraban, caminaban alrededor del edificio para tratar de llegar a las madres embarazadas.
Una madre joven, a punto de entrar al abortuario, habló con nosotros y nos dijo con seguridad, que ella nunca abortaría a su bebé y que estaba allí sólo para una prueba de embarazo. No obstante, tratamos de llevarla a un centro de ayuda pro vida para su prueba de embarazo ya que nunca se sabe lo que los empleados en el interior de este edificio le dirán la madre desprevenida. Nunca se puede confiar en un centro de abortos con una madre embarazada. Pueden tratar de convencerla de practicarse un aborto a pesar de que la madre no quiera. Los centros de aborto podrían mentir a las mujeres diciéndoles que están embarazadas con el fin de realizar un falso aborto y así obtener cientos de dólares. Finalmente, la joven madre fue a disculparse con nosotros diciendo que debido a que tenía que ir a trabajar en breve, no disponía de tiempo para ir con nosotros a un centro de ayuda pro vida. También este grupo de Regnum Cristi hablo con la madre de una joven embarazada mientras esperaba a su hija afuera. Una de los adultos consagrados, Fabiola, la convenció de llevar a su hija a un centro de ayuda pro vida. La abuela nos aseguró que su hija no estaba allí para un aborto ese día, ya que ésta era su primera visita allí, no la segunda. Un procedimiento de aborto se completa en dos días. El primer día la madre firma los documentos y el segundo día la madre aborta a su hijo. La abuela esperó a su hija afuera para llevarla a donde nosotros las guiamos. A pesar de que tenía muchísima literatura pro vida ese día para dar a las madres, todos los panfletos se me terminaron gracias a este grupo de chicas jóvenes de Regum Cristi que los distribuyó todos a las madres embarazadas. Hispanos de Texas por la Vida
0 Comments
Your comment will be posted after it is approved.
Leave a Reply. |
Archivos
July 2022
Tema/Categoría
All
|