Se aproxima el final del verano y la ¨ley o Acta del latido de corazón¨ SB8 aún está programada para ser implementada este Septiembre, a pesar de los muchos desafíos que han surgido en contra en la corte por grupos pro-aborto. Esta ley sólo aplica para el estado de Texas. Es capaz de reducir drásticamente la cantidad de bebés abortados en Texas, ya que prohíbe abortar a un niño aún no nacido con un latido de su corazón detectable. La ley es capaz de prohibir la mayoría de los abortos al comienzo del latido fetal, el cual puede ocurrir desde las seis semanas de embarazo.
Hasta ahora en Texas, los no-nacidos hasta 16 semanas no están protegidos legalmente de este horrible y fatal procedimiento. Además, bebés no-nacidos pueden ser abortados hasta las 20 semanas en algunos centros de abortos que tienen edificios con cierto tipo de infraestructura. Es profundamente motivador saber que se aproxima el día en que esta ley del latido de corazón se implementará. Sin embargo, hay muchas cosas que pueden suceder para evitar la efectividad de esta ley. En el pasado, hemos sido testigos de leyes creadas para proteger a muchos bebés no-nacidos, pero fueron derrotadas en las cortes. La historia de la legislación provida en este país ha sido muchas veces una pesadilla para nosotros a causa de las estrategias de las fuerzas pro-aborto. No obstante, esta legislación puede ser diferente y estamos bendecidos por ello. Cuando SB 8 entre en efecto este próximo 1ero de septiembre, su eficacia, según mi entendimiento, no dependerá de la aplicación de la ley, si no de cargos civiles aplicados en contra de aquellos que proveen un aborto después de la detección de latido fetal. En otras palabras, esta ley no funcionará de forma automática, sino que requerirá que un individuo haga seguimiento al acto para que aquellos que proporcionen deliberadamente el aborto, conociendo la existencia de la ley, sean acusados. La madre no recibirá castigo; es decir, el propósito y objetivo de la ley, que es prevenir el aborto de bebés con un latido de corazón dependerá de los individuos que decidan tomar acción al enterarse que un bebé con corazón ya latiendo fue abortado. El día 1ero de septiembre, no podemos quedarnos sentados como si esta ley será aplicada directamente, porque no es así. Para que esta ley sea implementada exitosamente, personas valientes deben ser, no sólo testigos de los abortos de bebés con un latido de corazón, si no que debemos estar involucrados para poder presentar cargos en contra de aquellos que proveen tales abortos. Sin nuestra intervención, esta ley no tendrá efecto. Por lo tanto, oremos y ayunemos con frecuencia para que, primeramente, esta ley sea implementada este septiembre, y que los individuos que sepan que un bebé con un corazón latiendo fue abortado en Texas, tengan el valor de informar a las autoridades. Mucha oración es necesaria. Frente al centro de abortos El propósito de los siguientes testimonios es para que nos demos cuenta que si no nos presentamos frente a las clínicas de aborto, las mujeres que van ahí, no vendrán a nosotros a nuestras casas, Iglesias o donde sea a escucharnos. Necesitamos estar ahí. Ya estando ahí, nuestro Señor usara nuestra presencia para salvar bebés. Mientras rezábamos frente al centro de abortos de la calle San Jacinto, hace unas semanas, una joven de color tomó el panfleto que le ofrecí cuando llegaba en su auto al estacionamiento. Me escuchó con una débil sonrisa antes de entrar, pero tuvo que seguir manejando pues le estaba bloqueando la entrada al carro que venía detrás de ella. Esta joven sí entró al edificio así que yo seguí con lo mío, tratando de comunicarme con muchas otras mujeres que llegaban al estacionamiento. Los vehículos llegaban continuamente, sin parar, así que mi mensaje les llegaba de forma incompleta a estas mujeres que llegaban al centro de abortos. Los empleados del edificio hacían señas a los coches que llegaban para que me esquivaran. Aproximadamente una hora más tarde, la joven de color que me sonrió salió del edificio caminando hacia mí y hacia otras dos personas que rezaban conmigo, nos dijo muy sonriente que ella iba a quedarse con su bebé. Estaba atónita mientras nos decía repetidamente que ella se quedaría con su bebé. Estaba agradecida por nuestro testimonio, y hasta mencionó con mucho entusiasmo que le gustaría unirse a nosotros muy pronto para ayudar a las madres a decidirse a conservar a sus bebés. Creo que fue en este momento en el que uno de los empleados nos dijo que esta joven había decidido salir del edificio sin practicarse el aborto debido a motivos personales que nada tenían que ver con nosotros. El empleado no se daba cuenta de que la mujer ya nos había explicado todo. No es un misterio que cuando una mujer embarazada decide abandonar el edificio porque ha cambiado de parecer, lo último que los empleados desean es que nosotros estemos conscientes y nos enteremos de esto. no nos demos cuenta de ello. La razón es que ellos quieren que asumamos que nuestra presencia ahí es una pérdida de tiempo sin resultados. En otra ocasión, Brenda y Erendi, junto con otras personas, se colocaron en la entrada lateral del centro de abortos, mientras que rezaban el Rosario. Brenda le regaló a una mujer de habla hispana un cupón para un examen de ultrasonido gratuito en un centro provida cercano, pues el autobús azul no se encontraba en el lugar. Uno de los guardias de seguridad le quitó el cupón a la mujer y lo rompió. La mujer caminó hacia Brenda y le pidió otro cupón, agradeciéndole mientras caminaba de regreso a su auto en el estacionamiento del centro de abortos. Se fue del lugar sin siquiera entrar al edificio. Hispanics of Texas for Life / Hispanos de Texas por la Vida Raul Melchor
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